Hoy ha sido un día revuelto, un día de mil sensaciones y pocas buenas. Nunca esperé que se dictara esta injusta sentencia. Me niego a creer que este sistema judicial sea justo. Los últimos sucesos han despertado una oleada de indignación colectiva y ciudadana, no es para menos: ¿Qué les vamos a enseñar a nuestras niñas? ¿Qué se defiendan o que no? ¿Que sean libres o que sean prudentes o que incluso tengan miedo? Basta ya! Las leyes desamparan en este caso a la mitad de la población.
No me extenderé más, pero estas barbaridades bien merecen mi repulsa, rechazo absoluto e indignación. Esta no es la justicia que quiero; espero que cuando los criminales estos salgan de la cárcel, los chicos de Alsasua hayan recuperado su libertad mucho tiempo antes.
Solo quiero
que los chiquillos que juegan libres en el patio del colegio puedan
seguir siendo libres toda su vida, sin que una parte de ellos sienta
miedo o desamparo. El no es no y vale ya de tanto sistema patriarcal,
jueces retrógrados y matones que se creen por encima de la ley.
Estamos contigo, hermana.
ALBA BERGARA
Integrante de la
Asamblea Municipal de Izquierdas – Corella Decide Erabaki
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